Ausencia
Es difícil definir el vacio, la ausencia, el hueco. En un principio no lo notas, no eres consciente de la pérdida, luego, poco a poco notas como algo no encaja en tu existencia. Ya no puedes decirle lo bien que le ha ido a tu hijo, su nieto, en su primer día de colegio. No puedes comentarle tus progresos en el trabajo para que pueda enorgullecerse. No puedes hablarle a cerca de eso que te preocupa, a ver si puede aconsejarte. No puedes simplemente visitarlo para saludarlo, para preguntarle qué tal sigue, para verlo. No puedes porque no está. No está y nunca volverá a estar, y caes en la cuenta que no podrás volver a verlo, a hablarle, a besarle.
Recuerdo cuando me iba al colegio, él me llamaba antes de salir de casa y me daba un trocito de pan mojado en el huevo frito que desayunaba, ¡qué rico estaba! También recuerdo que cada vez que íbamos de viaje yo quería siempre sentarme a su lado en el coche, aunque no siempre lo lograba. Recuerdo su humor, sus chistes, sus bromas. También recuerdos sus enfados y sus broncas, que con el paso del tiempo tengo que reconocer que tenía su razón.
Lo recuerdo como padre y lo recuerdo como amigo.
Y comienzo a echarlo de menos.
Recuerdo cuando me iba al colegio, él me llamaba antes de salir de casa y me daba un trocito de pan mojado en el huevo frito que desayunaba, ¡qué rico estaba! También recuerdo que cada vez que íbamos de viaje yo quería siempre sentarme a su lado en el coche, aunque no siempre lo lograba. Recuerdo su humor, sus chistes, sus bromas. También recuerdos sus enfados y sus broncas, que con el paso del tiempo tengo que reconocer que tenía su razón.
Lo recuerdo como padre y lo recuerdo como amigo.
Y comienzo a echarlo de menos.
Etiquetas: padre
posted by El Hermano Montgolfier | 12:21 a. m.
14 Comments:
Cuanto lo siento, hermano.
Es cierto que la ausencia se nota más en el día a día, en lo cotidiano. Al principio es como si se hubiesen ido de vacaciones, todos podemos estar un tiempo sin verles. Pero eso tiene un límite, y un día, de repente, ya no podemos más, y necesitamos el contacto.
Entonces lo que duele es el conocimiento, saber qué es lo que ha pasado, y que no tiene vuelta atrás. Que es imposible.
Es ley de vida. Pero una ley horrible y odiosa.
También un día aprendemos a conformarnos con el recuerdo, y ya no sufrimos tanto, y nos alegramos de haber podido disfrutar de ellos durante el tiempo que les tuvimos.
Un abrazo.
Lo siento mucho, muchísimo! En estos casos recuerdo siempre las coplas de Jorge Manrique, que me parecen un himno a los padres y a la vida; no sé si recomendarte que las leas ahora, si no más adelante.
Un abrazo muy fuerte y ánimo. Ten fuerza y recuerda que la vida sigue su curso.
Vaya... pues si que lo siento. Cuando alguien se va lo mejor que nos queda de él son los recuerdos, de hecho, quienes se van siguen vivos en nuestros recuerdos.
Un abrazo.
Solo un abrazo grande.
Es duro, mucho. Lo siento.
Un abrazo
¡Qué duro es! Y no hay forma de evitar el trago, de soslayarlo. Aunque otros hayamos pasado por ello, casi nada y casi nadie van a poder consolarte. Sólo su recuerdo, cuando, poco a poco, sea cada vez menos doloroso y más entrañable.
Un abrazo.
Lo siento muchísimo. Es un vacio que no se llena nunca, pero llega un momento que puedes recordarle sin esa pena que ahora te atenaza, con lo mejor de tu vida con el, con la parte mas buena que has vivido con el. Yo ya tengo muchos huecos y lo se. Un abrazo grande amigo.
Lo siento mucho. Un abrazo muy fuerte.
Un abrazo y ánimo.
Un abrazo. No sabemos lo que perdemos hasta que lo perdemos.
Hermano, ¿va todo bien? Son días muy difíciles, espero que hayáis conseguido superarlos. Un abrazo
La pérdida de un padre o una madre es terrible. Yo los perdí hace ya muchos años, y te puedo decir que solo el tiempo suaviza la pérdida.
Acéptala con resignación y encomiéndate a él todos los días que seguro que está a tu lado, aunque no notes su presencia.
Feliz año, y un abrazo
Me gustó mucho este post. Yo perdí a mi padre 3 meses antes que tú y firmaría lo que tu escribes. No es que te dé el pésame, es que me identifico. Un saludo
Acabo de leerlo. Lo siento mucho, amigo. Aunque también creo que siempre estará contigo. Sois parte de lo mismo y, aunque no lo veas, siempre estará ahí. Un abrazo:
-SuperPataNegra-
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